Es una obligación poder darle al centro de nuestra ciudad un nuevo impulso que se concrete con efectos estéticos, comerciales y de distención ciudadana.
Es un deber compartido por todos los ciudadanos, el Estado y el sector empresarial ir agregándole valor al espacio público con inversiones que redunden en beneficios concretos que luego se redistribuyen entre los vecinos, mejorándoles servicios y por ende calidad de vida.
Desde hace más de 7 años hemos venido planteando la idea de peatonalizar (conoce datos técnicos) el eje Arenales (100-0) y 25 de Mayo (0 - 200) para que esa modalidad urbanística contenga las actividades propias de una arteria destinada al paseo comercial.
Desde hace más de 50 años existen ideas de que hacer con esa calle.
El ejemplo es un malogrado retranqueo de viviendas que se puede observar en la zona del Macro y los comercios vecinos sobre vereda este.
Desde calle Pueyrredón hasta la calle Alem posee las veredas más angostas del casco céntrico y con tal motivo es una arteria desprovista de arbolado público.
Se criticó, en su tiempo, que no debería abarcar a Arenales por la presencia constante de ambulancias que acceden a la Clínica 9 de Julio, situación que debería contemplarse.
Demás esta decir los beneficios que reportaría peatonalizar el frente de la Escuela Gral. Manuel Belgrano y del Colegio Sagrado Corazón.
Igual solución acarrearía la concentración humana frente al cajero del Banco Macro.
Esta decisión, sumada a la semaforización existente, lo que señala a creces que es la arteria vehicular más compleja de la ciudad, posibilitará la vinculación del centro comercial con el centro institucional de la ciudad, es decir el conjunto arquitectónico turístico integrado por la Municipalidad, Plaza e Iglesia principal, accediendo al mismo por un corredor peatonal, que sea el portal de actividades para vecinos y visitantes.
También reportará beneficios en cuanto al tránsito y estacionamiento en una zona circundante de al menos 3 cuadras a la redonda y debería impedir la circulación de tránsito pesado al constituir una valla urbana innegociable.
Resulta obvio que al situar una peatonalizacion deberá hacerse un replanteo normativo y ejecutivo en todo el casco céntrico, por lo que debería constituir un trabajo de los dos poderes
municipales.En el interior salteño, Tartagal es un ejemplo en la materia, habiendo inaugurada su peatonal el domingo 21 de octubre, sobre calle Alberdi, respetando la arquitectura tradicional de la Parroquia "La Purísima", embelleciendo el paseo público con faroles, bancos, canteros e instalando un luminoso letrero que indica la hora y la temperatura ambiental.
Cerebro, billetera y manos a las obras.
